LA MUERTE DEL SONETO
Estas palabras, que me permito reproducir como si se tratase de una colaboración, pertenecen a Carlos E. Hernández "POTE". Gracias.
LA MUERTE DEL SONETO
Sabed que el soneto se suicidó...
no pudo serlo más de tan gastado.
Sabed que se cansó de sus ajustes,
de sus rimas y metros, de su cárcel
Y consumada la muerte de este aire
ya no hay posibilidad alguna de existencia
ni ha lugar el decir endecasílabo...
Fallecida esta forma de cantar,
tampoco se verán alejandrinos
árboles impúdicos de su perder las hojas
construyéndose eternos sus paciencias inciertas.
Sabedlo, sí, sabedlo... es importante
porque detrás de este canto arrasado
Sabed que el soneto se suicidó...
no pudo serlo más de tan gastado.
Sabed que se cansó de sus ajustes,
de sus rimas y metros, de su cárcel
sin remisión posible,
encabalgado a su destino fijo de versos siempre pares.
Y consumada la muerte de este aire
ya no hay posibilidad alguna de existencia
ni ha lugar el decir endecasílabo...
Fallecida esta forma de cantar,
tampoco se verán alejandrinos
árboles impúdicos de su perder las hojas
construyéndose eternos sus paciencias inciertas.
Sabedlo, sí, sabedlo... es importante
porque detrás de este canto arrasado
seguirá todo canto
aburrido de ser siempre lo mismo y seguiremos todos
cual sonetos acaso mal paridos hasta al final morir
siendo ruido abandonado a la nada. Carlos E. Hernández
"POTE"
"POTE"
0 Opiniones:
Escribe tu comentario
<< Volver al último artículo